Seleccionar página

Hoy vengo con una receta de aprovechamiento: unas deliciosas bolitas de coco y cacao. Una receta dulce sin gluten, sin harinas, lácteos ni azúcar refinada. Y además muy fácil y rápida.

Pero antes una pregunta: ¿eres aficionado/a a las bebidas vegetales?

Quizá por intolerancia a la lactosa, porque sigues una dieta vegana o simplemente porque te gustan, consumes habitualmente bebidas vegetales. Si es el caso, sabrás lo difícil que es encontrar en las tiendas una bebida vegetal que no esté llena de emulgentes, conservadores, aromas… o el omnipresente azúcar. Al final sabemos que lo mejor es hacerlas en casa. El método es fácil, aunque según los utensilios que utilices, mancharás más o menos. Yo suelo hacerme bebida de almendra y de coco. Puedes ver aquí una receta de leche de coco.

La almendra que queda en el filtro después de colar el líquido la aprovecho como harina de almendra. La paso por la sartén a fuego bajo o la horneo hasta que está seca.

Pero la pulpa de coco que queda después de hacer leche de coco, me resulta más difícil reutilizarla. Cuando se seca, queda demasiado fibrosa para mi gusto. Ha perdido la grasa y la humedad y queda una especie de pajitas pequeñitas. Una vez intenté molerla para hacer harina de coco, pero no conseguí textura de harina, solo pajitas más pequeñas.

Si os pasa como a mi y no sabéis muy bien cómo aprovechar ese coco que queda después de hacer la leche, os gustará ésta recetilla. Se puede usar la pulpa de coco inmediatamente después de hacer leche de coco, no hace falta secarla, molerla ni hacer nada con ella.

Ésta receta está hecha con 80 gramos de coco y me salieron 17 bolitas. Si tienes más coco, solo tienes que adaptar las cantidades. También puedes hacerlas mezclando el coco resultante de la leche con coco rallado normal, o hacerlas en cualquier momento con coco rallado recién comprado. Para el rebozo de coco he usado éste último, porque es más jugoso y rico que el que usamos para la masa.

INGREDIENTES

  • 80 gramos de coco y un poco más para rebozar
  • 1 plátano maduro
  • 2 cucharadas de cacao puro en polvo
  • 1 cucharada de miel

 

Ponemos todos los ingredientes en un procesador de alimentos y batimos hasta que todo esté bien integrado. Sobre todo hay que tener cuidado de que no quede ningún tropezón de plátano.

Volcamos la mezcla en un bol o fuente, aplanamos bien y dejamos reposar en la nevera. Cuando la masa esté bien fría y firme, preparamos el rebozo de las bolitas. Ponemos un poco de cacao en un cuenco o taza, y un poco de coco rallado en otro cuenco.

Con ayuda de una cucharita, vamos sacando porciones de la masa, procurando que sean todas del mismo tamaño. Les damos forma redonda haciéndolas rodar entre las palmas de las manos y las rebozamos con el cacao o con el coco. Las vamos colocando con cuidado en un plato, y ¡listas para comer!

Las puedes mantener en la nevera o dejar fuera a temperatura ambiente. No perderán su forma. Tómalas para merendar, con un café, como postre… ¡están deliciosas!

Pin It on Pinterest